Durante la presente
legislatura el Ayuntamiento de Madrid ha eximido
del obligado cumplimiento de la ordenanza municipal de protección contra la
contaminación acústica a los promotores
del evento MADO, más conocido como Orgullo
Gay. La normativa ambiental que el resto de ciudadanos estamos obligados a
cumplir, parece que no sirve para los
privilegiados empresarios de MADO.
MADO
es un evento privado con ánimo de lucro, promovido por AEGAL
(Asociación de Empresarios y Profesionales para Gays y Lesbianas de Madrid
y su comunidad), COGAM (Colectivo LGTB de Madrid) y FELGTB (Federación
Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales).
Durante
años el Ayuntamiento de Madrid ha sancionado a los promotores de este evento de hiperalcoholismo, por superar
de manera alarmante los niveles de ruido permitidos, poniendo en evidencia que
estamos ante un grave problema de ruido para los residentes de Chueca. Con
Carmena, lamentablemente, la legislación que protege a los ciudadanos de la
contaminación acústica dejo de hacerlo; usando el grosero atajo legal de declarer
a MADO 'fiesta de interés general' se exime a sus promotores de cumplir la
normativa.
La
Asociación de Vecinos de Chueca llevamos décadas luchando contra la
contaminación acústica que afecta a los derechos y a la salud de los vecinos; incluso
somos parte del grupo de expertos contra el ruido en la Comisión Europea.
Nuestra
asociación no está en contra de que cualquier colectivo realice celebraciones en los espacios públicos de
la ciudad pero SIEMPRE conciliando con
el derecho fundamental que tenemos las personas a poder vivir y dormir en la
intimidad de nuestros domicilios. MADO,
como se demuestra año tras año, no concilia con nuestros derechos.
La
vida de las personas residentes en el centro de Madrid cada vez es más
complicada.
La saturación de ocio nocturno y actividades ruidosas, el hacinamiento de bares
y terrazas, el uso de nuestros edificios como hoteles para turistas con la
lacra de las viviendas turísticas…expulsan cada día a más vecinos de sus
hogares. Esta siniestra tendencia no ha hecho más que multiplicarse con la
alcaldesa Carmena, quien con decisiones como la que aquí denunciamos
– sobra recordar que MADO es el evento que más perturba la vida de los vecinos
del centro de Madrid – abunda en las
políticas de expulsión de los residentes del centro en beneficio de la
industria del turismo, del alcohol y del ruido.
Por todo lo anterior, y
ante el clima de opinión pública sobre la cuestión, queremos reiterar nuestra
posición: eventos organizados con
ánimo de lucro y gestionados por empresas privadas no deben ser objeto de trato
privilegiado, ni eximidos del cumplimiento de la legislación de aplicación
general. Y nos avergüenza profundamente que quien se supone es alcaldesa de
todos los madrileños entregue nuestra salud al negocio del alcohol y el ruido
en que se ha convertido MADO.